Mediciones de infrarrojo cercano: ¿cómo funcionan?
Las mediciones del infrarrojo cercano (NIR) se basan en bandas de absorción específicas en el espectro electromagnético entre 800 y 2500 nanómetros (nm). Esta región está justo por encima de la región de luz visible de 400 a 700 nm. Las ondas electromagnéticas de la región tienen la mejor combinación de energía, sensibilidad y absorción para ser útiles en las mediciones cuantitativas de materiales sólidos.
Si bien los analizadores de espectro completo pueden utilizar todo el espectro y tratamientos matemáticos multivariantes, como la regresión de componentes principales (PCR), los mínimos cuadrados parciales (PLS) o las redes neuronales, los fotómetros utilizan «cortes» del espectro que corresponden a matices moleculares específicos y absorciones vibracionales asociadas.
Los fotómetros utilizan filtros de interferencia de paso de banda estrecho que tienen un ancho de banda específico, normalmente de 50 nm de ancho, aunque el ancho de banda a veces depende de la aplicación. El NIR tiene bandas anchas, a diferencia de los picos agudos de la región infrarroja. Los enlaces comunes son el O-H (1940 y 1420 nm) en el agua, el C-H (2340 nm) en compuestos orgánicos y aceites y el N-H en las proteínas. Los sensores NIR son instrumentos extremadamente sensibles que están optimizados para medir la absorbencia de las muestras en estas regiones de longitud de onda específicas. La cantidad del componente que se va a medir es proporcional al nivel de absorbancia en estas longitudes de onda específicas.
Fotómetros NIR
La luz brillante en estas longitudes de onda hace que el enlace químico correspondiente vibre y absorba energía. Piensa en distintos sectores del público de un estadio a los que se les pide que griten y salten cuando su sección aparece destacada en el Jumbotron del estadio.